¿En qué nos vamos a divertir el resto de nuestras vidas?
...pues ¡viviéndola!… lo más creativamente posibles, creando
cosas y situaciones donde, además podamos embarcar a otros.
Ya experimenté - mi inolvidable cuarto de hora - cuando hace un par de años participé, junto a mi hija Claudia, en la Exposición de los afiches que están en este blog y que aún nos da tema e hicimos felices a quienes nos apoyaron en esta escaramuza.....¡inolvidable!
Lo más importante es no perder la cualidad más preciosa que tenemos: la frescura de la curiosidad, que con los años, ninguna de las dos hemos perdido. La mayoría de las gentes la pierden entre los 20 y 30 años.
Pasada esa edad no son más que su propio reflejo y el resto de su vida transcurre copiándose a si mismos, con más menos detalles, según la memoria y repitiéndo de una manera cada vez más mecánica y más aparatosa lo que han dicho, hecho, pensado, querido, en la época en que eran.
¡Es la pelea que hay que dar!
Alguna vez anoté esto, lo acabo de encontrar en un cuadernillo que no parece cuadernillo, con un lápiz mina cuya mina apenas se distingue:
Es una alegría divina la de crear.
No hay mas seres que los que crean.
Todos los demás son sombras, que flotan sobre la tierra, ajenos a la vida.
Crear es matar la muerte
Crear es salir de la prisión del cuerpo
Es arrojarse al huracán de la vida, es, sencillamente, ser
Ya experimenté - mi inolvidable cuarto de hora - cuando hace un par de años participé, junto a mi hija Claudia, en la Exposición de los afiches que están en este blog y que aún nos da tema e hicimos felices a quienes nos apoyaron en esta escaramuza.....¡inolvidable!
Lo más importante es no perder la cualidad más preciosa que tenemos: la frescura de la curiosidad, que con los años, ninguna de las dos hemos perdido. La mayoría de las gentes la pierden entre los 20 y 30 años.
Pasada esa edad no son más que su propio reflejo y el resto de su vida transcurre copiándose a si mismos, con más menos detalles, según la memoria y repitiéndo de una manera cada vez más mecánica y más aparatosa lo que han dicho, hecho, pensado, querido, en la época en que eran.
¡Es la pelea que hay que dar!
Alguna vez anoté esto, lo acabo de encontrar en un cuadernillo que no parece cuadernillo, con un lápiz mina cuya mina apenas se distingue:
Es una alegría divina la de crear.
No hay mas seres que los que crean.
Todos los demás son sombras, que flotan sobre la tierra, ajenos a la vida.
Crear es matar la muerte
Crear es salir de la prisión del cuerpo
Es arrojarse al huracán de la vida, es, sencillamente, ser
No hay comentarios.:
Publicar un comentario